Las historias detrás de ‘LA Originals’, el documental sobre hip hop norteamericano que se produjo en Argentina

Brian Maya, productor de LA Originals, habla sobre cómo Underground, la productora de Sebastián Ortega, llegó a contar la historia de Estevan Oriol y Míster Cartoon en el Hip Hop de la Costa Oeste Crédito: Devin Stinson/Netflix
Brian Maya, productor de LA Originals, habla sobre cómo Underground, la productora de Sebastián Ortega, llegó a contar la historia de Estevan Oriol y Míster Cartoon en el Hip Hop de la Costa Oeste Crédito: Devin Stinson/Netflix

 

 

Un homeless en pleno bajón de heroína, Eminem en el pico de su carrera, exconvictos, Kobe Bryant, lowriders, alfombra roja: Los Ángeles. Más que la historia del fotógrafo Estevan Oriol y el tatuador Mister Cartoon, LA Originals es un documental sobre el espacio donde se gestó una estética. Y aunque mucha de su imaginería hoy sea de alcance universal y haya sido asimilada por el mercado (H&M con los estampados de las manos haciendo la L y la A), todo se gestó desde los márgenes de la cultura chicana, aún hoy sin el lugar que se merece en la historia oficial del hip hop. «Está bastardeado como todo lo latino en Estados Unidos», dice Brian Maya, productor y guionista del audiovisual. «Nos dimos cuenta de la importancia cuando todos los grossos nos empezaron a dar bola, pero no imaginábamos que los latinos y los chicanos se iban a identificar tanto».

Como un acto de justicia poética, el círculo se completa así: LA Originals , que durante el mes de abril se ubicó en el top 5 de lo más visto en Netflix a nivel global, fue producida en un cuarto inundado y lleno de mosquitos ubicado en Cabrera al 5800, pleno barrio porteño de Palermo. «La hicimos con Underground, Sebastián [Ortega] tenía el material de Oriol, pero como estaban con El Margina l, al que destinaron todos los editores principales y las mejores máquinas, a mí me tocó el cuarto de limpieza, con dos compus viejas», se ríe Maya. Dos años de producción mediante, el resultado final es un documental de dos horas en el que la sociedad artística entre Estevan Oriol -director del documental- y Mister Cartoon se construye tanto a partir de testimonios como los de Snoop Dogg («Nadie que no sea Cartoon me tatúa a mí o a mis hijos», dice) como del retrato de las calles de skid row, el suburbio de Los Ángeles donde ambos plantaron S.A. Studios, su base de operaciones desde la que por durante 13 años llevaron la cultura callejera a tatuajes, sesiones de fotos y videoclips.

«Básicamente, hay dos formas de hacer un documental», explica Maya. «Podés hacerlo súper real o como un relato, nosotros hicimos un relato». Para dar con ese relato, Sebastián Ortega, admirador y conocedor de ambos, convenció a Oriol de trabajar juntos luego de seis meses de negociar derechos de imagen y demás cuestiones legales. Una vez encaminados, el trabajo de edición implicó condensar más de 300 horas de material audiovisual y 40 terabytes de fotos entre el archivo de Oriol, que filmó absolutamente todo desde 1994 en distintos formatos según la época (vhs, una Bolex 6mm, mini dvd…), y las entrevistas que lograban hacer en Estados Unidos. La de Eminem, claro, la más difícil de todas. «Hice un trabajo de detective», relata Maya. «Fui del publicista al manager y de ahí al abogado hasta dar con su asistente personal. Le escribí cada diez días durante tres meses hasta que nos dijo que estaba disponible. En el documental aparece un montón porque no paraba de hablar, lo quiere mucho a Estevan».

Entre la década del 90 y buena parte del siglo XXI, Estevan Oriol y Mister Cartoon fueron testigos y artífices. Beyoncé, Al Pacino, Justin Timberlake, Robert De Niro, Blink 182, Danny Trejo, Kim Kardashian, Michelle Rodríguez, Dr. Dre… todos aparecen en el documental siendo tatuados o retratados por ellos, pero también están los que fueron expulsados del sistema, por pobres, adictos y latinos. «La cultura necesitaba otra voz», se escucha decir en el documental. Y por eso el espacio se vuelve clave también en términos metafóricos: la subcultura va desde los márgenes hacia el centro, nunca al revés. En su búsqueda por dar cuenta de la importancia de la cultura chicana en el imaginario visual norteamericano, LA Originals pone también en valor a una de las bandas más subvaloradas del hip hop, Cypress Hill, a quien Oriol y Cartoon mencionan como los hombres clave detrás de la popularidad del género.

 

 

FUENTE : LA NACION Por Sebastián Chaves 

Compruebe también

Sol Pérez abandona Gran Hermano 2024

Sol Pérez abandona Gran Hermano 2024

La influencer y abogada tomó la decisión de dejar el reality conducido por Santiago del …

Murió Rina Morán, histórica locutora radial

Murió Rina Morán, histórica locutora radial

La locutora, de risa inconfundible, tenía 96 años. Se había iniciado como actriz siendo una …

Comentários no Facebook