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El hijo de Cristina Kirchner dijo que debía acompañar a sus hijos en el inicio de clases, pero su ausencia alimenta la creciente interna dentro del oficialismo y aumenta la preocupación del Gobierno por un posible quiebre del bloque.
Máximo Kirchner no acompañó a Alberto Fernández en la apertura de Sesiones Ordinarias y crece la tensión interna en el Frente de Todos.
En plena crisis interna del Frente de Todos por el avance de un acuerdo con el Fondo Monetario Internacional (FMI), Máximo Kirchner faltó este martes a la apertura de Sesiones Ordinarias por parte del presidente Alberto Fernández. Argumentó que sus hijos les pidieron que los acompañara en el inicio de clases, pero su ausencia alimenta las versiones sobre un quiebre del bloque oficialista en el Congreso.
Aunque desde el kirchnerismo niegan que Máximo Kirchner buscó evitar cruzarse con el Presidente el día en que ratificó el envío del proyecto de acuerdo con el FMI al Congreso, la crisis dentro del bloque oficialista es creciente y la ausencia del exjefe de bloque fue interpretada como un mensaje puertas adentro del Frente de Todos y para la militancia.
Máximo Kirchner no fue al Congreso y aumenta la crisis del oficialismo
La justificación sobre su ausencia trascendió en los pasillos del Congreso tras el discurso de Alberto Fernández, al mismo tiempo que comenzaron a circular las lecturas sobre el desplante del hijo de la vicepresidenta Cristina Fernández de Kirchner.
En realidad, no se trata de un hecho poco común: días atrás, La Cámpora se había ausentado también del acto que el Presidente realizó con la juventud peronista en La Plata.
Según dejaron saber tanto en el Congreso como en Casa Rosada, el exjefe de la bancada oficialista se habría comunicado con el Presidente antes del acto de apertura de sesiones para informarle sobre su decisión. Sin embargo, lo que generó dudas es que el ciclo lectivo en Santa Cruz comienza recién mañana, al igual que en la mayoría de las provincias.
Las diferencias de Máximo Kirchner con el Gobierno mostraron un punto de quiebre cuando el líder de La Cámpora decidió dar un paso el costado como jefe del bloque del Frente de Todos en la Cámara de Diputados por no estar de acuerdo con el rumbo que estaban tomando las negociaciones con el FMI.
Desde el kirchnerismo duro creen que implicará un ajuste sobre los sectores más postergados. El hijo de la Vicepresidenta dijo no estar dispuesto a ser quien defienda el acuerdo y negocie con propios y con la oposición los respaldos al proyecto.
Qué puede pasar en el Congreso con el tratamiento del acuerdo con el FMI
En los últimos días, creció con fuerza la idea de que los diputados que responden a Máximo y Cristina Kirchner se abstendrán de acompañar el proyecto de acuerdo con el FMI. En esa línea, el faltazo al Congreso de este martes por parte del líder de La Cámpora acrecienta esa posibilidad.
Ante esta situación, Alberto Fernández dependerá de la votación de la oposición, fundamentalmente de Juntos por el Cambio, aunque la salida del recinto de los legisladores del PRO cuando el Presidente apuntó contra Mauricio Macri por la deuda pone en duda que eso termine sucediendo.
Máximo Kirchner y Sergio Massa aseguran que la alianza entre ambos dirigentes del Frente de Todos se mantiene intacta.
En Juntos por el Cambio hacen malabares entre no quedar señalados como los que impidieron el acuerdo con el FMI y acompañar un proyecto que los propios legisladores del oficialismo no están dispuestos a votar.
En esta incertidumbre se enmarca la llegada del proyecto de Alberto Fernández al Congreso. Lo que está confirmado es que ingresará por la Cámara de Diputados y que Sergio Massa y Germán Martínez (nuevo titular del bloque del Frente de Todos) serán los encargados de que avance con éxito hacia el Senado.
